En una madrugada agitada, funcionarios del Control de Ingreso Provincial de Productos Alimenticios (CIPPA) confiscaron dos cargamentos que en total transportaban 4.000 kilos de carne en mal estado. Los operativos, realizados en la Ruta 180 y Ruta 6, desarticularon la distribución de estos productos que tenían como destino Rincón de los Sauces, Neuquén, Centenario y Cutral Co.
“Era carne vencida. Ingresar esta mercadería es un atentado a la salud pública, directamente”, alertó Andrés Piotti, presidente del CIPPA. La mercadería provenía de La Pampa, San Luis y Mendoza y, según detalló el funcionario, había excedido el tiempo máximo permitido para el consumo. “Una vez faenada, la carne tiene diez días de vida útil, y este cargamento tenía aproximadamente 15 días”, explicó.
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Dos intervenciones en una noche
El primer operativo se realizó a la 1 de la madrugada, cuando inspectores del CIPPA detuvieron una Toyota Hilux proveniente de Alvear, Mendoza, que se dirigía a Neuquén. En la inspección descubrieron que transportaba 580 kilos de carne, entre cortes sin hueso y 29 costillares de asado, sin la habilitación sanitaria correspondiente.
Tras labrar la infracción, el vehículo fue escoltado hasta Rincón de los Sauces, donde la carne fue decomisada y destruida en el basurero local, cubriéndola con cal para su degradación en tierra.
Cuando los inspectores regresaban de este procedimiento, se encontraron con un camión Ford Cargo con una carga aún mayor. Tras la inspección, se comprobó que transportaba 3.600 kilos de carne en condiciones irregulares, valuada en 50 millones de pesos.
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En este segundo caso, dos personas fueron identificadas. Si bien eran particulares, uno de ellos tenía licencia del SENASA para el transporte de alimentos, por lo que será multado severamente.