Fernando Rivarola, jefe de la Unidad Fiscal Especializada en Cibercrimen y Evidencia Digital, confirmó que tomaron conocimiento de la extorsión a varias personas en distintas provincias argentinas “a través de un abogado de Trelew, porque personas de distintos puntos del país comenzaron a llamarlo diciendo que le estaban reclamando sumas de dinero usando su nombre. Nos contactamos con una víctima de Corrientes y eso nos permitió iniciar la investigación”.
“Básicamente utilizaron WhatsApp y llamadas telefónicas, por lo que el seguimiento nos condujo al interior de la Alcaidía de Trelew”, detalló Rivarola, agregando que se pudo certificar a un número importante de víctimas.
“Algunas no alcanzaron a desembolsar dinero, pero hay una que transfirió 600 mil pesos a una cuenta que fue identificada y estamos haciendo el seguimiento de ese dinero para saber el destino final. El dinero se depositó en la cuenta de un detenido de la Alcaidía”, afirmó.
“La modalidad es un contacto con connotación sexual por Facebook, en Messenger, y posteriormente viene el reclamo utilizando el nombre de este abogado de Trelew, pero también con falsa documentación judicial. Han copiado los sellos de las Oficinas Judiciales, de los jueces, de fiscales y distintos abogados, con los cuales construyen escritos falsos e intimidan, haciéndoles creer a las personas que existe una causa, que hay una orden de detención y que la única forma de evitarlo es pagando una conciliación”.
“Crean un perfil falso en Facebook de una jovencita, postean alguna foto sugerente de esta jovencita que a priori no se puede establecer si es mayor o menor de edad. Luego de lograda la comunicación de índole sexual, le hacen saber al interlocutor que la joven es menor, que además padece de una enfermedad de tipo mental y que los padres están reclamando un resarcimiento bajo amenaza de hacer la denuncia por grooming, abuso sexual, intercambio de material, etc”.
“Detectamos por lo menos unas 20 personas de las cuales se ha iniciado el reclamo extorsivo, no las hemos podido contactar a todas, son de distintos puntos del país, pero con quienes hablamos nos dieron información importante”.
Rivarola reconoció que estas conductas “son bastante constantes en los centros de detención, aunque este último tiempo no teníamos tantas porque en los centros de detención se elevó el control de ingresos, básicamente de celulares, pero aparecieron fuerte en la Alcaidía desde hace unos 10 días muchos hechos”.
En esta causa “estamos monitoreando por lo menos tres aparatos con distintos chips. El perfil del Facebook hasta hace unas horas estaba activo aun, nosotros no lo bloqueamos porque genera evidencia que nos sirve para la prueba, pero ellos mismos les dan de baja”.