El individuo llamó la atención de policías que efectuaban controles en el denominado “Rincón del Diablo”.
Personal policial que realizaba patrullaje preventivo observó algo sospechoso poco antes de la 1.30 de este lunes. De un Citröen C4, en calle Chacabuco al 1100 descendía una pareja. El hombre parecía esgrimir en su mano un arma de fuego.
De inmediato, los guardianes de la ley le pidieron que se identificara y se comprobó que efectivamente se trataba de arma de fuego lo que en vano quiso disimular. Era una pistola Bersa, calibre 9 x 19, que en su almacén cargador contenía 8 cartuchos a bala.
Posteriormente, por razones de jurisdicción, se notificó a la Seccional Primera, cuyo personal se llevó detenido al sujeto hasta las dependencias de Rivadavia y Güemes.
Se dio intervención, además, a Maximiliano Morsucci, del Ministerio Público Fiscal (MPF), y a Florencia Diez, de la Oficina Judicial. La jueza penal de turno es Raquel Tassello.