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Secta rusa en la Patagonia: liberaron a casi todos los detenidos mientras siguen investigando el origen

Veinte personas volvieron a caminar libres por Bariloche. Pero no son turistas, ni vecinos comunes: son los integrantes de una presunta red de trata liderada por Konstantin Rudnev, un gurú ruso con pasado oscuro y delirios místicos. Así lo decidió la justicia federal, que solo permaneció tras las rejas al supuesto líder espiritual, detenido el 28 de marzo cuando intentaba huir a Brasil.

La decisión fue firmada por el juez Gustavo Zapata, quien permitió la libertad bajo condiciones estrictas: las 19 mujeres y un hombre liberados deberán presentarse periódicamente ante la Justicia y tienen prohibido salir del país.

Cómo se originó la causa 

La causa, impulsada por el fiscal Fernando Arrigo, sigue su curso y tiene en el centro de la escena a Rudnev, de 57 años, acusado de intentar obtener la ciudadanía argentina para radicarse en Bariloche. En Rusia fue condenado a 11 años por abuso sexual y se lo vincula a discursos que mezclan violencia, alienígenas y manipulación mental.

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Todo estalló a mediados de marzo, cuando una joven rusa de 22 años embarazada llegó al hospital de Bariloche escoltada por dos mujeres que no la dejaban hablar. El médico personal detectó signos claros de sumisión y activó la denuncia. Días después, dio a luz por cesárea y allí intentaron inscribir al bebé como hijo de Rudnev, una maniobra que —según la fiscalía— buscaba facilitar su naturalización y evitar controles migratorios.

El operativo del 28 de marzo logró frenar la fuga. En el aeropuerto de Bariloche capturaron a Rudnev ya seis mujeres. Al mismo tiempo, otros integrantes fueron detenidos en Aeroparque, también rumbo a Brasil. Se sospecha que la secta había elegido Bariloche y también Brasil como bases estratégicas para operar.

Rudnev sigue detenido en una cárcel federal de máxima seguridad en Chubut. Su historial es tenebroso: abusos comprobados a 15 mujeres y 5 hombres —algunos menores—, castigos por comer pan y delirios de contacto con dioses de la estrella Sirio.

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