A un año de la desaparición de Cecilia Strzyzowski, el caso que conmocionó a Chaco, este sábado la misma provincia amaneció con un hecho estremecedor: el hallazgo de una mujer de 30 años descuartizada luego de estar desaparecida durante diez días. Por el caso ordenaron detener al principal sospechoso: el hombre que la vio por última vez con vida.
Se trata de Johana González, quien había perdido todo tipo de contacto desde el pasado 21 de mayo, cuando su madre presentó una denuncia por su ausencia.
Sus restos aparecieron en una laguna de Resistencia, donde los investigadores llegaron luego de observar unos videos que muestran a una persona que se acercaba hacia ese espejo de agua para arrojar bolsas.
Fue dentro de una de esas bolsas que encontraron un cráneo y distintas partes del cuerpo de Johana. En tanto, se mantenía este sábado a la tarde el rastrillaje en la zona en búsqueda de más restos humanos.
El lugar ya se encontraba en la mira de los investigadores. Días atrás se había llevado a cabo un allanamiento en una casa a 100 metros de donde aparecieron los restos de la mujer. En esa vivienda reside el principal sospechoso del crimen, Mario Barrientos.
La orden de búsqueda de Mario Barrientos, principal sospechoso por la desaparición de Johana Fernández.El hombre es la persona que vio por última vez a González con vida. El viernes se presentó a prestar declaración testimonial, pero no quedó detenido y le impusieron la obligación de presentarse todos los días ante las autoridades.
El hallazgo de este sábado complican su situación: esta tarde la fiscal de Género Nélida Velázquez ordenó la inmediata detención de Barrientos. En ese sentido, la Policía de Chaco ya lanzó una campaña para encontrar al hombre, buscado por «supuesto femicidio».
La fiscal explicó que los restos que aparecieron en la laguna ya fueron enviados al Instituto de Medicina y Ciencias Forenses para la identificación formal. «Hasta ahora no sabemos a quién corresponde este cuerpo humano; se va a hacer el reconocimiento pertinente y recién allí estaremos en condiciones de decir de quién se trata», añadió Velázquez.
En tanto el comisario general Manuel Victoriano Silva se refirió al operativo de búsqueda del sospechoso en todos los lugares que frecuenta, y las testimoniales de todas las personas posibles que puedan tener contacto con él.
Según informaron fuentes policiales, tras presentarse ante los fiscales, decidieron secuestrarle el teléfono celular a Barrientos para peritajes en profundidad.
En su declaración, el hombre de 42 años – de contextura física robusta, de tez trigueña, calvo, con barba y de 1,83 metros de estatura – admitió que el 21 de mayo a las 18.30 estuvo con Johana en la casa que alquila y que mantuvieron relaciones sexuales y que él le pagó 5 mil pesos.
También comentó que la mujer volvió dos horas más tarde a reclamarle una deuda de 2.500 pesos, que él también asegura haberle pagado. Y añadió que luego de ese trámite, que duró cinco minutos, ella se retiró de la casa.