Luego de que en este lunes se diera por finalizado el cepo cambiario y el dolar cotizara libremente, Mauricio Macri apoyó la medida tomada por el Gobierno de Javier Milei, aunque advirtió que “habrá una devaluación, obviamente”. En ese sentido, relativizó el impacto y sostuvo que “es algo en que no hay que volverse locos”.
“Esto es algo que debía hacerse, normalizar el curso del país. Este es un paso adelante importante. No creo que los mercados se vuelvan locos con esta decisión porque la base el equilibrio fiscal es fuerte. Creo que los va a recibir favorablemente. Habrá una devaluación, obviamente, pero no es algo tan dramático. Va a generar crecimiento en los costos de vida diarios, pero si uno normaliza los costos de flujo para volver a tener inversión vamos a volver a tener un salario del 2 y medio anual”, consignó Macri.
En ese sentido, Macri desestimó que la devaluación tenga que trasladarse directamente a los precios ya que cada empresa deberá evaluar que impacto tiene el dólar en el producto final. “El comercio está vendiendo muy poco y el nivel de consumo está muy por debajo de las expectativas, entonces no da para decir, ‘tengo todo vendido, aumento el precio’. No se está dando ese escenario”, especuló.
En charla con CNN Radio, el líder del PRO, aseguró que para el Gobierno, la salida del cepo era “una prioridad, una urgencia”; y que si tardaron hasta hoy en levantarlo es porque en el pasado inmediato “no había certezas suficientes, pero ahora creen que el momento adecuado es este”.
“Bienvenidas sean las certezas -remarcó Macri-. Si no tenemos reglas normales no hay futuro. En ningún país del mundo hay cepo. Estamos viviendo en una emergencia que nos dejó Alberto Fernández, Cristina y Sergio Massa, pero no se puede perpetuar. Todo se construye si hay confianza, y este Gobierno hasta ahora la tiene”.
“Desde el primer día sabíamos que el cepo era una muleta para alguien como Argentina que necesita volver a correr. El país necesita volver a tomar dinámica en el sector de la inversión. Con el cepo, esa inversión nunca iba a llegar. Iba ser la mínima y necesaria. Pero insuficiente”, opinó Macri. Y calificó: “Estamos todavía muy lejos de donde queremos llegar, pero creo que vamos en el rumbo correcto”.
En ese sentido, Macri opinó que para “evaluar este proceso” habrá que esperar un par de años y “si esta decisión sirvió para que el país crezca y baje la pobreza”. “Hay que darle un tiempo para ver realmente cómo son las cosas. Hay que ver el método y como funcionan las distintas áreas del Gobierno. Falta todavía claridad en el desarrollo de ciertas cosas”, indicó.
Sobre el aumento de la inflación de marzo y el posible número que arroje luego del cambio en el sector cambiario, Macri sostuvo que “es el precio necesario que significa caminar sin muletas”; pero confió en una reactivación económica imitando a países vecinos como “Chile, Uruguay o Brasil”, según dijo. “Volvemos a seer un país normal. Eso tiene un costo”, remarcó.
Macri resaltó a “la competencia comercial” como herramienta y sostuvo: “Lo que corrige todo es la competencia. Todo. La magia de la competencia. Cuando existe competencia real, los precios se acomodan porque todo el mundo tiene que mejorar la calidad de lo que hace y bajar el precio todo lo posible para poder vender”.
Macri le recordó a Milei que “bajar la inflación no es tarea fácil” y que salir de la herencia que heredó “va a llevar más tiempo del que se pensaba”. “Tal vez el Presidente pecó de entusiasta porque él es así, pero creo que sirve para que todos tengamos un baño de humildad y nos demos cuenta de que hay que colaborar. Todos tenemos que colaborar después del desastre que nos dejaron”, remarcó.
En la charla, el expresidente relativizó el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y salió al cruce de las versiones que marcan una crisis libertaria tras el acuerdo logrado. “El Fondo atiende a aquellos países que tienen dificultades, pero no son idiotas. No te dan plata para que te la fugues. Negocian un plan económico y te señalan como salir hacia adelante”, explicó.
Y atacó: “Cuando el Fondo nos envió los 45 mil millones de dólares fue para cubrir las cuotas de deuda que no había pagado Cristina, porque el mundo ya no nos creía. Los que me criticaban por pedirle plata al FMI y acusaban de vaciarlo no se si lo hacen por ignorancia o por kirchneristas. O por la combinación de ambas. Todo está en los libros del Banco Central que la plata que ingresó, repagó deuda de vencimientos que tuvieron lugar durante el gobierno de Cristina y nunca se pagaron. Así que toda esta fantasía de la plata fugada del Fondo, son sólo chicanas estúpidas que se alejan de la realidad”.
D.D.