1, octubre, 2024
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Empleadas domésticas: el Gobierno sigue sin convocar al Consejo para actualizar salarios

Pasó diciembre, pasó enero y el Gobierno no convocó a la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares que debería definir el salario mínimo del primer trimestre de 2024, a pesar del reclamo de las distintas asociaciones sindicales que integran la Comisión.

La anterior reunión se realizó el 29 de septiembre y fijó la escala mínima salarial de octubre, noviembre y diciembre. Por ejemplo, para diciembre, la categoría más numerosa, que es prestación de tareas de limpieza, lavado, planchado, mantenimiento, elaboración y cocción de comidas y, en general, toda otra tarea típica del hogar, se fijó en $ 1.416,50 la hora y $ 173.758 mensual para el personal con retiro.

De acuerdo a los Informes del INDEC, el personal de Casas Particulares suma 1,7 millones, pero menos de 500.000 están registrados.

Según la Asociación de Trabajadoras del Hogar y Afines (ATHA) durante 2023 los aumentos del personal fueron del 154% versus una inflación del 211,4%: representa una pérdida del 18,4%. A esto se agrega el deterioro adicional por la inflación de enero, febrero y marzo que podría rondar el 75%. Ya los salarios de enero no registraron ningún aumento oficial.

Por estas razones, además de su urgente convocatoria, ATHA plantea que se disponga un incremento urgente e inmediato de las remuneraciones mínimas de las distintas categorías profesionales de la actividad para compensar los efectos de la reciente devaluación de la moneda nacional, la inflación de 2023 y la estimada para los meses de enero y febrero de 2024.

Además, teniendo en cuenta el aumento de las tarifas del transporte público de pasajeros, reclaman que se establezca un adicional por viáticos obligatorio y de naturaleza remunerativa por cada día efectivamente trabajado.

También reclaman que se desarrolle e implemente, a través de los organismos estatales competentes (AFIP, ANSES, etc.), una campaña nacional de control y fiscalización tendiente a la regularización laboral y previsional de las más de un 1,1 millón de trabajadoras remuneradas del hogar que actualmente prestan tareas de manera informal, como así también se restablezca la figura del “empleador doméstico presunto” establecida en 2013 y que fue derogada en 2016.

NE

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