Psiquiatra de Maradona: Agustina Cosachov.
Este jueves fue toda una sorpresa que la psiquiatra Agustina Cosachov, una de las acusadas por la muerte de Diego Armando Maradona, prestara una “declaración parcial”, como le anunció su abogado al presidente del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°3 de San Isidro, poco antes de las 16.
Fue la primera de las siete personas sentadas en el banquillo de los acusados en declarar en el juicio que comenzó el 11 de marzo pasado, y aseguró que “hasta hoy no sé” cuál fue la causa del fallecimiento del exjugador y director técnico.
“Mi rol siempre estuvo en torno a mi profesión, que es la psiquiatría. Siempre actué con total convencimiento de que lo que hacía era lo mejor para el paciente”, declaró ante los jueces Maximiliano Savarino —presidente del tribunal—, Verónica Di Tommaso y Julieta Makintach.
Imputada de presunto homicidio simple con dolo eventual, en ese momento la psiquiatra lloró y dijo que el 18 de noviembre de 2020 “no le recetó ningún medicamento por el edema” porque “no sabía”, mientras Diego se encontraba en la casa del barrio cerrado San Andrés, donde murió una semana después.
Apuntó contra la coordinadora de la empresa de medicina privada que atendió a Maradona, Nancy Edith Forlini, por prohibirle contactarse con los enfermeros Ricardo Almirón y Dahiana Gisela Madrid, señalando que “confié en el equipo médico” que estaba a cargo de su salud, advirtiendo que “no hicieron nada”.
Admitió haber pedido la internación domiciliaria el 4 de noviembre de 2020, que firmó el certificado correspondiente, y sostuvo que “nosotros planteamos una internación domiciliaria con apoyo de la prepaga, que era indispensable”.
En ese sentido, Cosachov dijo “la familia estaba enterada, porque eran requisitos tener un médico clínico, neurólogo, enfermeros especialistas en estos casos y específicamente hombres, una ambulancia por si se necesitaba traslado y dispositivo para la realización de estudios. Eso era fundamental. El auditor me dio el ‘OK’ y que lo pasaba [a sus superiores] para armar”.
Para sostener sus dichos, la médica psiquiatra leyó ante el Tribunal mensajes de Whatsapp mantenidos con todas las partes involucradas.
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