El Tesoro nacional (MInisterio de Economía) deberá enfrentar este mes dos licitaciones para renovación de letras en pesos por un total de 13,8 billones de pesos, con vencimientos el 14 y 24 de abril. En el actual contexto, se transforman en un gran desafío, pues podría demandarle al gobierno un significativo aumento de tasas para conseguir renovar las colocaciones de las entidades privadas tenedoras de los títulos que vencen.
Ya en la última licitación de marzo, el Tesoro debió resignarse a una renovación parcial (sobre un vencimiento de 9 billones de pesos, solamente colocó letras por 6,2 billones) y con una amplia participación del Banco nación como tomador de títulos. El resto del financiamiento habría corrido por cuenta del Banco Central, quien habría adquirido letras del Tesoro en pesos en los días siguientes a la licitación.
La subasta del próximo lunes, por 6,5 billones, funcionará, en consecuencia, como un termómetro del mercado frente a un nuevo cuadro de situción local e internacional totalmente agitado.