Durante la mañana de este viernes se concretó la audiencia obligatoria de control de la prisión preventiva del caso que tiene como condenado al malabarista Ángel Ezequiel Oganeku.
El caso por el que fue condenado se registró el 17 de marzo de 2018 en un departamento del barrio LU4, cuando la víctima de siete meses estaba recostada llorando sobre una cama de dos plazas en el dormitorio de su madre. Había quedado al cuidado del artista callejero.
Según la acusación de la Fiscalía, en momentos en que la madre del bebé se retiró a comprar, Oganeku le provocó diversas lesiones calificadas como graves y que pusieron en riesgo la vida del niño. También abusó sexualmente del pequeño.
El malabarista fue declarado por el tribunal de juicio penalmente responsable del delito de lesiones graves, en concurso real con abuso sexual con acceso carnal, agravado por haber sido cometido contra una persona menor de 18 años, aprovechando la situación de convivencia preexistente. De ese modo, fue condenado a 15 años de prisión.
El tribunal de control que sesionó este viernes en los tribunales penales de Comodoro Rivadavia estuvo integrado por los jueces Alejandro Soñis y Carlos Tedesco. La fiscal Lorena Garate expuso que el 20 de febrero la Corte Suprema de Justicia de la Nación “resolvió que resultaba inadmisible la queja de la defensa y desestimó la presentación directa”.
La causa tuvo una sentencia condenatoria, a 15 años, en septiembre de 2019 y fue confirmada por la Cámara en lo Penal local, en febrero de 2020. En noviembre de ese año, el Superior Tribunal de Justicia de Chubut rechazó el recurso extraordinario de la defensa ante la Corte y luego la defensa interpuso la queja ante la Corte Suprema de Justicia.
En ese contexto, la representante fiscal sostuvo que no variaron las circunstancias, persisten los peligros procesales y solicitó que se mantenga la prisión preventiva de Oganeku hasta que la sentencia quede firme.
Por su parte, el defensor público Gustavo Oyarzun consintió el pedido de la Fiscalía, tal cual ha sido requerido, es decir, que se mantenga la prisión preventiva de su asistido por seis meses o hasta que la sentencia quede firme.
Los jueces resolvieron prorrogar la prisión preventiva que cumple el malabarista por seis meses o hasta que la sentencia quede firme.