La provincia de Chubut informó este viernes que se trabajaba para restablecer lo más rápido posible el servicio eléctrico de tres localidades de la provincia, luego de que una vez más vandalizaron líneas de energía durante un robo de cables, un problema que en la vasta provincia patagónica se repite como en muchas otras zonas del país y que genera múltiples inconvenientes.
La Secretaría de Infraestructura, Energía y Planificación provincial detalló que el personal de la Dirección General de Servicios Públicos estaba intentando recuperar el suministro eléctrico en las localidades de Gaiman, Dolavon y 28 de Julio, tras los daños en las líneas de energía que las abastecen.
Desde el área a cargo de Nicolás Cittadini, detallaron que «aproximadamente a la 1 de la mañana de este viernes 9 de agosto se produjo la salida de servicio de las dos líneas de 33 Kilovolts que alimentan a las localidades de Gaiman, Dolavon y 28 de Julio, debido a un hecho vandálico por intento de robo en el cruce subterráneo de las dos líneas de 33 Kilovolts que se encuentran entre Trelew y Gaiman».
En el comunicado, indicaron que se trató de un ataque muy peligroso, ya que en esta ocasión «prendieron fuego los cables y dañaron las cubiertas protectoras para robarlos, lo que provocó la salida de servicio de las dos líneas».
Como suele suceder en estos casos, las primeras tareas estaban orientadas a evaluar los daños y realizar una reparación provisoria y de emergencia, que permita restablecer el servicio lo antes posible, para luego encarar soluciones más profundas.
Igualmente, debido a los importantes daños y lo complejo de la situación, aclararon que «llevará aproximadamente 24 horas restablecer al menos una línea para alimentar a todas las localidades».
El ataque e intento de robo de cables de este viernes a la madrugada se da un mes después de un hecho muy similar, en una zona cercana a Trelew, que generó un importante apagón en la esa ciudad.
El miércoles 10 de julio, también cerca de la medianoche, hubo un sabotaje a la red eléctrica local para robar costosos transformadores, en una modalidad que -pese a los esfuerzos por combatirla- no se logra eliminar.
En aquella ocasión, el ataque sucedió sobre la ruta provincial 8 que lleva hacia Telsen, entre la rotonda y el aeropuerto viejo, y afectó a barrios del noroeste de la ciudad chubutense.
“Voltearon un par de columnas de media tensión, picando el hormigón y cortando los hierros, por lo que estimamos que estuvieron trabajando por lo menos tres horas. Tiraron las dos columnas y después intentaron robar un transformador afectando barrio Luz y Fuerza y a dos grandes consumidores, un mayorista y una empresa de transportes”, precisó un técnico de la Cooperativa Eléctrica local a medios locales.
A los usuarios residenciales les restituyeron el suministro durante la noche, pero las empresas debieron esperar que finalizaran con las tareas durante la mañana siguiente al ataque.
La distribuidora informó que también sufrió importantes daños la base de una tercera columna, que sostiene un transformador fundamental para la distribución de electricidad en la zona afectada.
Ante los ataques reiterados para robar los transformadores, la Cooperativa y la policía convinieron hace un tiempo poner “dispositivos antiescalamiento” en las columnas de la red eléctrica, pero ante eso, los atacantes deciden directamente voltearlas.
En consecuencia, además de los trastornos por el corte de servicio sufrido por los usuarios, el ataque del mes pasado en Trelew generó pérdidas valuadas en torno a los 4 millones de pesos.